fbpx

Margarita Foss

🌟 Encuentra tu propósito: La historia de cómo dejé atrás la insatisfacción

Encuentra tu propósito La historia de cómo dejé atrás la insatisfacción

Cuando me preguntaban que quería ser cuando era una niña, yo no tenía respuesta para eso, pensaba mucho y hasta me daba pena decir que nunca quise ser nada, pero los años pasaron y cuando miro hacia atrás veo que lo que yo siempre quise ser: FELIZ.

La definición de felicidad para mí, cuando era una niña era tener un príncipe azul que me tratara como una princesa, pues eso era lo que yo veía en las telenovelas.

En mis años de adolescencia y juventud vi la vida cómo algo que no entendía, me decía: “¿Para qué existir? igual vamos a morir, venimos a sufrir, nadie puede ser feliz realmente”.

Observaba a mi alrededor… inconformismo por doquier, a todos siempre les faltaba algo.

Así que un día dejé de creer que la felicidad existía, no creía en eso de vivir plenos. Para mi, plenitud era una fantasía…Veía a mi familia, a las personas que me rodeaban en mi barrio, entre mis amistades, por todos lados, eran vidas inconformes, bien sea por falta de dinero, por infidelidad, por juicios en cómo lucían, cómo veían a otros, todos tratando de arreglarle la vida alguien más que no fuera su propia vida. Esto último me hace recordar este refrán: “Mirando la paja en el ojo ajeno, sin mirar la viga en el ojo de ellos”. Irónico.

Y así se pasó mi vida, continué viviendo mi vida insatisfecha, convencida de que no podíamos tenerlo todo.

Un día escuché a una mujer que le faltaban sus piernas decir que la felicidad sí existía, lo expresaba con tanta seguridad que hasta ese día ví mi vida como lo venía haciendo tantos años atrás. Fue allí, justamente allí, cuando inicié mi búsqueda encontrando un nuevo propósito.

Con perseverancia y amor propio, logré la felicidad y plenitud de las que tanto otros hablaban. No te mentiré diciéndote que fue fácil, que no tuve caídas o dudas en mi camino.

Cuando lo encontré se sintió demasiado fuerte en mi corazón para ignorarlo, otros llamarían lo que experimento como locura. Pero los que nos dedicamos a algo que amamos tanto, sabemos que es demasiado poderoso y que nos vale madre lo que otros piensen. Nosotros atendemos el llamado de nuestro corazón, el de Dios.

Yo estoy convencida de que todos tenemos un llamado, pero los ruidos tan altos de nuestra mente cómo el pasado, los pensamientos negativos, las creencias limitantes, juicios, quejas, no permiten que muchos atiendan a ese llamado.

Es solo, cuando desarrollas la capacidad de bajarle el volumen a esos ruidos, cuando puedes escuchar el susurro que Dios te da

Ahora, mi propósito es enseñar a otros lo que yo logré.

Esto se convirtió en mi obsesión, algunas veces no me deja dormir en las noches de tanta emoción. Este propósito no me deja parar, es algo que amo con todas las fuerzas de mi ser. Transformar vidas, despertar conciencias, enseñar a otros lo que yo sé, dar esperanza.

¡ESTE ES MI PROPÓSITO DE VIDA!

¿Estoy loca? Si.

¿Estoy obsesionada? Si.

¿Quiero poder abrir la mente de toda mujer que se me atraviesa para que entienda, que si no tratan lo que sucede dentro de ellas, continuarán insatisfechas? Definitivamente SÍ.

Yo quiero que tú puedas escuchar tu llamado así como yo lo escuché, que te de esa vida y te haga vibrar, con ganas de continuar, de hacerte llorar de agradecimiento.

TU TIENES EL PODER EN TUS MANOS

Si tu te conectas con esto que te acabo de compartir y sientes en tu corazón que necesitas cambiar lo que sientes, YO PUEDO AYUDARTE.

Envíame un mensaje de texto que diga: “Margarita hablemos” y permíteme acompañarte en tu viaje a la plenitud y felicidad.

Realmente espero que este texto haya tocado tú corazón y que te haga valiente para dar el primer paso.

Con cariño,

Margarita Foss